miércoles, 2 de noviembre de 2011

Historias y tradiciones barriales

Hay quienes clasifican a los barrios de Buenos Aires en dos grandes categorías: los que tienen historia y los que no la tienen. Entre los primeros estarían San Telmo, La Boca, Montserrat, San Nicolás, Retiro, Recoleta
Balvanera y otros donde los muros de antiguas casonas aún rezuman el aliento de rancias familias patricias y cuyas calles fueron testigos de nuestra historia patria.
En cambio los otros los de sin historia, serian aquellos de reciente formación, entre los cuales se encuentra nuestro querido barrio de Villa Real.
Aquí no existen mansiones centenarias ni familias de abolengo, pero aun está fresco el recuerdo de aquellos quinteros italianos, españoles y portugueses, que comenzaron a poblar estos parajes, junto a ellos, estos otros inmigrantes que abandonando conventillos se afincaron en estos andurriales tras el sueño del sueño de la casita propia.
Nuestra historia chica es la historia del trabajo y la esperanza. Es la historia de obreros que debían cruzar diariamente charcos y zanjones hasta el medio de transporte más cercano que lo acercara hasta su lugar de trabajo y que de vuelta por las noches y junto a sus vecinos, interpretaban una sinfonía de martillos y serruchos levantando los muros de sus humildes viviendas.
Es además, la historia de hombres de empresas que tuvieron la audacia y la visión de instalar aquí pequeñas industrias, talleres y comercios.
Es también, la historia de heroicas maestras que llegaban chapoteando barro a las precarias escuelas.
Es en definitiva la historia de un vecindario que sintió al barrio como algo propio, a través de precursoras sociedades de fomento, y la lucha por una mejor calidad de vida.
Citando a nuestro querido Roberto Gritta- "NUESTRO RECONOCIMIENTO A ESOS PIONEROS A TRAVES DEL ESTUDIO Y LA DIFUSION DE SU EJEMPLO"